DeClaradamente

Algún día se ha quedado Alba (o Sofía) sola en casa y nos hemos sorprendido de lo fácil que puede llegar a ser tener a una niña sola en casa. Como en los anuncios de niños -digo- con niños que pintan tranquilamente mientras sus padres leen, por ejemplo, un libro. Bueno, eso no es algo que pase generalmente en nuestra casa. En mi trabajo vamos a colaborar con una famosa blogger sueca para hablar de niños pequeños y estrés y les he ofrecido mi ayuda porque os aseguro que con las gemelas de 4 y otro niño de 6 años lo único que deseaba por Navidades eran unos buenos cascos protectores del ruido 😬. En mi experiencia hay parejas que tienen un niño o niña, tranquilo y dulce y se felicitan por su buen trabajo como padres. Eso hasta que tienen otro niñ@ que llega como un terremoto. Aunque creáis fervientemente en la educación muchas veces vemos padres que se comportan de forma muy parecida con sus hijos y sin embargo los niños son muy diferentes. Pero la gente es muy rápida en echar las culpas

 Para empezar quiero decir que yo estoy siempre agradecida a las profesoras de mis hijos por su paciencia- tanto con los niños como sus padres- y cariño. Sin embargo soy generalmente crítica con la pedagogía, es decir con mis colegas psicólogos o pedagogos que deciden que es lo que se va a enseñar. Mi ideal de educación sería algo al estilo de Montessori donde cada niño vaya aprendiendo según sus intereses y luego enseñe a los otros lo que sabe. Pero entiendo que el currículum de hoy en día donde los niños están aprendiendo a leer con 4! años está a años luz de ese modelo... Y la educación en valores puede ser especialmente controvertida. Mis gemelas de 4 años me vuelven a casa con un ejercicio de valores que pone “orden” y al mes siguiente “obediencia” y yo me pregunto en qué cole les he metido 😬. Entiendo que en tiempos de Covid si nos dijeran que trabajan en el cole el “compartir” o “ayudar” a más de un padre les daría un yuyu. Luego con el valor “orden” me traen un dibujo de un ni

Todo el mundo tiene ahora una historia de antes y después del Covid y realmente parece que uno mire hacia mucho mucho tiempo atrás. Hace un año vivía yo en Suecia, como ya os empecé a contar, con mi marido y tres niños pequeños, un trabajo en el que llevaba poco más de un año y bueno también un poco en el mismo caos que ahora (dicen que es mejor con el tiempo pero no sé...). Fue entonces cuando decidimos mudarnos a España y estar cerca de mi familia, antes del Covid, luego los planes se retrasaron pero seguimos hacia delante porque hay decisiones que han de seguir su curso, sobretodo cuando los dos habíamos dejado nuestros trabajos y existía la posibilidad de por fin venir a España.  Realmente lo habíamos planeado casi todo el tiempo desde que me fui hace 15 años pero siempre hay cosas que se ponen de por medio y yo casi había perdido la esperanza. Es bien sabido que las condiciones laborales son mejores en Suecia, ya no solo el sueldo sino sobretodo la conciliación, es decir el poder